Uno de los municipios más pintorescos que hay en la costa levantina es Altea, lugar que antes era muy hippy ya que allí se reunían las comunidades de músicos, pintores y artistas de diferentes nacionalidades para desarrollar sus talenos. Actualmente está mucho más desarrollado pero aún así en la parte antigua del pueblo te puedes encontrar con muchos de estos artistas.
Altea está a media horita de Alicante y a 10 de Benidorm, así que es el lugar ideal para poder visitar esa costa y estar cerca de todo. Estas son las cosas más interesantes de Altea:
– Es un pueblo construido en una colina y que tiene delante el mar, el efecto de verlo a lo lejos es fantástico ya que muchas de sus casas son blancas, como las andaluzas.
– Hace poco hicieron un paseo marítimo que es una maravilla y que va desde la playa Albir (perteneciente a Alfaz del Pí) hasta el puerto de Altea.
– Entre los lugares de interés de Altea está su iglesia, construida en la cima de la montaña y a la que se llega callejeando por calles estrechas y disfrutando del encanto de esa zona, en donde hay también muchas plazas con bares y resturantes para que degustes las especialidades de la zona. Desde allí podrás ver una panorámica de toda la costa.
– En el puerto puedes ver un montón de barcos y pescadores, y si miras al otro lado verás la playa con un montón de niños jugando. Un contraste fantástico. El barrio de pescadores es encantador, te recomiendo pasarte por allí también.
– Altea es un lugar en el que te puedes encontrar residentes de multitud de nacionalidades, especialmente de todas las europeas. Un lugar con diferentes culturas donde puedes aprender mucho sobre éstas.
– En cuanto a la gastronomía, siendo un pueblo marinero está claro que destacan los pescados y mariscos. Además, preparan el arroz divinamente y en multitud de platos. Camarones, langostas… sin duda no te decepcionará nada de lo que allí puedas comer.