El otro día escribí un post sobre las casas rurales y qué cosas se deben tener en cuenta para su elección. Hoy me gustaría volver a tocar el tema pero para centrarme en sus ventajas e inconvenientes, para que así puedas valorar ambas cosas y saber si una casa rural es la mejor opción para ti. Elegir un alojamiento adecuado es imprescindible cuando vas de viaje, ya sea por unas vacaciones o por un par de días de descanso o trabajo en otra ciudad.
El lugar que elijas tiene que ofrecerte todo lo que necesitas para cada viaje en concreto, ya que no siempre necesitamos lo mismo de un alojamiento. Por ejemplo, yo cuando me voy de Todo Incluido quiero un hotel lujoso que me ofrezca de todo, pero cuando voy de turismo a una ciudad me sirve con un hotel normalito ya que estaré en él únicamente para dormir.
Las ventajas
Una de las principales es que el alojamiento es totalmente independiente, con lo que no tendrás que compartir ninguna parte de la vivienda con nadie, además de que así no te podrán molestar los ruidos de otros inquilinos. Otra muy importante es que está en un entorno natural con paisajes preciosos que ofrecen mucha tranquilidad a los huéspedes, algo perfecto si lo que quieres es desconectar del mundanal ruido durante unos días.
En las casas rurales te sentirás «como en casa» mucho más que si estuvieras en un hotel ya que realmente estás en una casa, con todas las comodidades y la libertad que eso supone. Otra gran ventaja es su precio ya que suelen ser mucho más baratas que los hoteles, además de que suele haber mayor disponibilidad.
Las desventajas
No son una buena opción si vas a estar más de dos semanas ya que las casas rurales suelen estar en pequeños pueblos alejados de grandes ciudades, con lo que puedes llegar a aburrirte un poco si estás demasiado tiempo. Otra desventaja es que deberás ocuparte de la limpieza y de hacer las camas y la comida, algo que no tienes que hacer en un hotel y que hay que tener muy en cuenta para analizar si compensan las vacaciones teniendo que «faenar» en la casa.