El turismo ha evolucionado y ya no solo se centra en viajar a un lugar y visitar los principales atractivos o puntos turísticos. Ahora es mucho más porque se abre la opción a vivir experiencias y a hacer recorridos distintos no solo a pie o por los medios de transporte convencionales, sino también por otros menos habituales como el parapente. Una práctica que atrae a cada vez más usuarios y que permite hacer turismo de una manera distinta. ¿Qué lugares se pueden ver desde el aire? Aquí van algunas propuestas.
Andalucía
Dentro de Andalucía, varios son los lugares que pueden visitarse en parapente. Los principales, o quizá más atractivos, son la Sierra de Grazalema, en Cádiz, y Montellano, en Sevilla. Aunque estas zonas pueden sobrevolarse en cualquier momento del día, lo cierto es que los paisajes adquieren una especial belleza con la puesta de sol.
En Cádiz, las zonas para el vuelo libre o vuelo sin motor suelen concentrarse en la zona de Algodonales, en Sierra de Líjar, a la entrada del parque natural de Grazalema y El Bosque. Este enclave está situado justo a los pies de la Sierra de Grazalema.
Por su parte, en la provincia de Sevilla, el área para sobrevolar se localiza en Montellano, que dista pocos kilómetros de Algodonales. Es posible recorrer también la vega del Guadalquivir y la sierra norte de Sevilla.
País Vasco
En el País Vasco, las opciones para hacer turismo en parapente se concentran en Sopelana, en Vizcaya. Este lugar, a unos 20 kilómetros de Bilbao, es una de las zonas favoritas para practicar parapente, ya que cuenta con muchos atractivos como la brisa marina, los acantilados, el salitre y las playas salvajes localizadas en este enclave geográfico.
Aquí, además, es fácil encontrar diferentes empresas especializadas, sobre todo, en la zona conocida popularmente La Salvaje, donde están los acantilados que protegen la playa de Barinatxe.
Comunidad Valenciana
En esta autonomía, una de las mejores opciones para hacer turismo desde el aire es Palomaret (Agost), en Alicante. Situada a unos 12 kilómetros de la costa, desde aquí se observan espectaculares vistas de la provincia de Alicante. Incluso, permite hacer diferentes tipos de vuelos porque aquí hay corrientes de aire caliente, facilitando la práctica del vuelo térmico. Su principal característica es la de ser más natural. De hecho, una persona se puede sentir como si fuera un pájaro y subir a distancias más altas desde el despegue para otear mejor los paisajes o puntos de interés como el castillo de Santa Bárbara en Alicante.
Islas Canarias
Dentro de listado de destinos no pueden faltar las Islas Canarias. Las opciones son diversas, pero en esta ocasión vamos a incluir a Tenesar, en Lanzarote. Aquí es impresionante sobrevolar las bocas de los volcanes, los terrenos de lava y mar, descubrir cómo se funden las tierras de color negro y rojizo de la isla con el azul del cielo y del Océano Atlántico.
Además, la ventaja de sobrevolar la zona de Tenesar es que permite ver también desde las alturas el Parque Nacional de Timanfaya. No obstante, dentro de Lanzarote hay más opciones como la Playa Quemada, Macher y Orzola.
Cataluña
En Cataluña, una buena opción para hacer turismo en parapente es el Vall d’Àger, en Lérida. Aquí se encuentran algunos de los más bellos paisajes desde el aire. Y no solo los de este valle, sino también los del Congost de Mont-rebei, el Pantano de Canyelles y de Camarsa o la Plana de Lleida.
Dentro de estos últimos, merece la pena especialmente el Congost de Mont-rebei, dado que sus 600 hectáreas y paredes verticales de más de 500 metros de altura, separan las provincias de Lérida y Huesca, conforman uno de los espacios naturales más singulares del Prepirineo.