La cosmopolita ciudad de Barcelona ofrece al viajero ocasional una gran cantidad de lugares de renombre internacional que visitar. En este artículo mencionaremos lo esencial que ningún turista que disponga de un fin de semana puede perderse. Como alojamiento, te proponemos los hoteles en Poblenou, bien comunicados con el centro de la ciudad pero libres de sus desventajas. Cuenta la zona, en efecto, con algunos de los mejores hoteles baratos en Barcelona, con una muy adecuada relación calidad/precio y cuantas comodidades puedas desear en una estancia breve.
Gaudí y sus obras de arte
En primer lugar, debemos mencionar las obras del genial e inimitable arquitecto Antonio Gaudí y, entre ellas, el icono más conocido y universal de la Ciudad Condal: la Sagrada Familia, templo maravilloso de estilo neogótico y modernista. Te recomendamos una visita temprana, para evitar colas, y, si puede ser, guiada, con el objeto de no perder detalles de la rica simbología que encierra el templo y sus fachadas. El Parque Güell es, asimismo, personalísimo e indescriptible, decorado con profusión de azulejos brillantes, fuentes y esculturas alegóricas, con predominio de lo curvilíneo. Por último, no debes dejar de admirar las fachadas de la Casa Batlló y la Casa Milà (también conocida como La Pedrera) y el Palacio Güell. Todos estos edificios, de formas caprichosas que a nadie dejan indiferente, han sido declarados por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad.
El Barrio Gótico
En segundo lugar, un paseo por el Barrio Gótico te trasladará a la Barcelona histórica, con restos del pasado romano y muchos edificios medievales que perduran. Descubre la Catedral de la Santa Cruz y Santa Eulalia que, como tantas catedrales españolas, muestra los diversos estilos arquitectónicos propios de las épocas que duró su construcción: orígenes paleocristianos y visigóticos, un pasado románico y el predominio gótico final. El Barrio Gótico también presume de albergar la Basílica de la Mercè, dedicada a la Patrona de Barcelona, y la Basílica de Santa María del Mar (ya famosa antes de la novela de Ildefonso Falcones La Catedral del Mar). Podemos terminar nuestro paseo en la Plaza del Pi, a los pies de otra majestuosa iglesia gótica de armoniosa torre octogonal. Terrazas, puestos de venta callejera y artistas ambulantes le dan su encanto especial a la plaza.
Arte e historia
Si te atrae el arte y la historia, te recomendamos que hagas una cuidadosa selección de lo que deseas ver, pues es mucho y muy variado lo que ofrece la ciudad. Estos son algunos de los Museos que puedes visitar: El Museo Nacional de Arte de Cataluña, con un predominio de arte catalán – aunque no solo – y el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona, con piezas que muestran la evolución artística desde mediados del siglo pasado hasta nuestros días. Son dignos de mención la Casa-Museo de Gaudí, la Fundación Miró y el Museo Picasso. Otros espacios de gran interés son el Disseny Hub, consagrado al diseño, el Museo de las Ciencias Naturales, CosmoCaixa – un museo interactivo dedicado a la divulgación de la ciencia – el Museo de Cera, el Museo de Historia de la Ciudad y, por supuesto, para los buenos aficionados, el popular Museo del Fútbol Club Barcelona.
Espectáculos
Llegada la noche, te sugerimos una visita a la Fuente Mágica y su maravilloso espectáculo de luces y sonido en lo alto del Montjuïc. Es esta una colina que ofrece una magnífica vista de la ciudad y que alberga el curiosísimo Poble Espanyol, con sus recreaciones de rincones típicos de España, así como la retorcida Torre de Telecomunicaciones, el Estadio Olímpico Lluís Companys, el Palau Sant Jordi, un Jardín Botánico y muchos teatros, museos y pabellones construidos con ocasión de la Exposición Internacional de 1929.
Si el tiempo acompaña, Barcelona cuenta con unas magníficas playas y sus correspondientes paseos marítimos, por los que se puede dar un agradable paseo bien andando, bien en bici. (¿Sabes lo que es el bicing?).
Por último, date un capricho a la hora de comer: recuerda que estás en una de las capitales gastronómicas de España.
Desde luego, Barcelona es una ciudad con mucho que ver, pero lamentablemente es imposible hacerlo en un fin de semana, al menos en mi opinión. Si por lo que sea solo se dispone de ese tiempo, yo no dejaría de visitar la Rambla y las obras de Gaudí. Aunque solo sea desde fuera, merece la pena visitarlas. Por supuesto, los aficionados al fútbol, no pueden perderse el tour del Camp Nou.