En Barcelona espera un lugar que enamora a los visitantes desde el primer momento, especialmente si buscan una opción para mimarse en sus próximas vacaciones y disfrutar del sol mientras se desconectan del mundo.
Logrando el equilibrio perfecto entre la vida característica de las grandes metrópolis y el encanto de los pueblos pequeños, Sitges cumple con esto y más, una ciudad cargada de actividades para todos los gustos y edades. Después de interesantes paseos o excursiones llenas de adrenalina, la mejor forma de terminar el día es en una piscina privada, por lo que sin duda la opción perfecta de alojamiento la ofrece el alquiler de una villa, la forma garantizada de vivir experiencias inolvidables.
¿Qué ver y hacer en una visita a Sitges?
El encanto natural de la localidad, se combina con la calidez de su gente y un sinfín de actividades para elegir. Si bien presume de una ubicación privilegiada a escasos 45 minutos en tren desde Barcelona o 30 minutos desde el aeropuerto internacional, la masificación turística no representa problema. La cantidad de residentes permanentes juega a favor del visitante garantizando vida local activa durante todo el año ofreciendo un despliegue de tiendas boutique, museos y más de 300 restaurantes para escoger.
Las 19 playas e impresionantes escenarios naturales, se prestan para garantizar la variedad en términos de ocio y entretenimiento. Las opciones abarcan desde caminatas, bici de montaña y equitación, hasta paseos en kayak, paddle board y surf.
La vida nocturna tampoco se queda atrás, pubs y clubes nocturnos esperan para ofrecer diversidad, asimismo, sobran los chiringuitos, tour de vinos y bares de playa. Los amantes de la cultura y el arte deben dejar espacio para recorrer los distintos museos y galerías de arte, así como apuntarse a excursiones históricas.
¿Por qué elegir villas con piscina privada para alojarse en Sitges?
Sin duda alguna, las villas vacacionales ofrecen una experiencia inigualable. Sitges pone a disposición de los visitantes un abanico de opciones para elegir, variando en tamaño, estilo y ubicación. Además de la posibilidad de disfrutar un espacio exclusivo para disfrutar del sol y refrescarse, alquilar villas con piscina implica pasar el tiempo en un entorno rodeado de hermosos espacios verdes, ideales para preparar barbacoas y comer al aire libre.
Las panorámicas que se aprecian desde sus terrazas son un verdadero deleite a la vista, pudiendo escoger entre el Parque Natural del Garraf, el propio municipio o el mar mediterráneo. La comodidad de sentirse como en casa se combina con la oportunidad de compartir en espacios pensados para vivir experiencias únicas. En su mayoría, se incluye en el alquiler la contratación de servicios adicionales que mejoran la estadía, desde clases o entrenamientos personalizados, hasta la atención de un chef particular.
Ahorrar en viajes grupales y viajar con mascotas
En comparación con los precios de las habitaciones de hotel, alquilar una villa es mucho más rentable cuando se vacaciona en grupos grandes, sin apartar la posibilidad de ahorrar dinero cocinando en ella. Viajar con los amigos peludos tampoco supone ningún inconveniente, las villas están perfectamente adaptadas para recibir a las mascotas familiares como un integrante más.
Ubicación privilegiada
Las villas disponibles en Sitges tienen en común una estratégica localización, permitiendo a los visitantes el disfrute de todos los servicios que brinda el municipio. La cercanía con las playas, restaurantes y un sinnúmero de actividades, garantizan las vacaciones soñadas.
El estrés no tiene cabida en una opción de alojamiento que tiene todo a escasos metros de distancia. Indistintamente que la intención sea dormir con el sonido del mar en fondo o despertar en majestuosos escenarios en medio del bosque, hay alternativas de sobra para escoger.