La primera pregunta que te has hecho es: ¿dónde vamos? Pues bien, siéntate en un lugar tranquilo de la casa y haz una lista de destinos. Intenta elaborar una lista bastante grande, y no te preocupes por poner demasiados destinos, así podrás ir usándola en diferentes periodos vacacionales de la familia. Aquí tienes algunos consejos que te ayudarán a elegir los lugares más adecuados:
– Evalúa a tu familia. Unas buenas vacaciones tienen que agradar a todos los miembros de la familia, aunque eso es muchas veces casi imposible. Aunque el destino no agrade a todos, intenta buscar actividades para aquellos a los que no les gusta el sitio elegido. Recuerda que nadie mejor que tú conoce a tu familia.
– Involucra a tus hijos. Es muy importante la participación de los niños durante todo el proceso de selección. Te podrán dar idear y comentar temas en los que ni siquiera habías pensado. El intercambio de opiniones es muy importante.
– No experimentes demasiado. Realizar cosas nuevas y atrevidas puede ser muy importante en un viaje con los niños, pero ten cuidado con las consecuencias. Ten presente las capacidades físicas de cada miembro de la familia y selecciona actividades en base a eso.
– Comprueba la temporada. Asegúrate de que no tendréis ningún problema cuando lleguéis a vuestro destino. Comprueba la temporada de huracanes, lluvias, etc. Tienes más peligro de sufrir un percance así cuando reservas fuera de temporada.
– Tiempo suficiente. Ni poco ni mucho, debes organizar el viaje con tu familia de manera que aprovechéis bien los días y tengáis tiempo para todo.