Basta con escribir los nombres de varias ciudades importantes en un buscador de hoteles para darse cuenta de que hay muchísimos repartidos por todo el mundo. Los hay muy económicos, los hay de lujo, los hay que están a dos pasos de la playa… Es fácil clasificarlos, aunque en ocasiones nos llevamos alguna que otra sorpresa al darnos cuenta de que existen hoteles que son únicos en su especie. ¿Un ejemplo? El Hotel Ottilia de Copenhague, que se ha hecho famoso por ser el primero que garantiza a sus clientes que no van a compartir habitación con ningún microbio.
Adiós a los gérmenes
Los daneses se han aliado con una empresa llamada ACT.Global para acabar con los microbios. Gracias a la tecnología patentada ACT CleanCoat, que por cierto es inodora y transparente, los microbios se descomponen gracias a un proceso denominado fotocatálisis. El dióxido de titanio, que se encuentra en los filtros solares, es el que se encarga de hacerlo posible.
No hay que preocuparse por la gripe, la salmonela, el moho o cualquier tipo de alérgeno que pueda tener la tentación de aparecer por algún rincón. Eso sí, hay que ir renovando el aislamiento que se aplica a través del aerosol que han creado, ya que la purificación del aire no aguanta más de un año, tiempo en el que los olores de comida o el humo de los cigarrillos pueden volver a hacer acto de presencia.
Karim Nielsen, director ejecutivo de Brockner Hotels, que es la empresa que gestiona el Hotel Ottilia, asegura que llevan dos años probándolo y el resultado ha sido satisfactorio. Además, también lo están aplicando en el Hotel Herman K, que de hecho fue el «primer conejillo de Indias».
No es barato, pero compensa
Hay que decir que las buenas noticias van más allá de los huéspedes, ya que las personas que se encargan de limpiar las habitaciones no se ven en la obligación de utilizar productos químicos que pueden causar reacciones alérgicas. Eso sí, el coste de cubrir de aerosol una habitación es de 2.2000 euros anuales, una cantidad muy elevada que por lo visto se compensa con esa menor utilización de productos químicos, ya que el trabajo del personal de limpieza se reduce en un 50%.