Ya os he comentado en varias ocasiones que me encantan los museos, así que siempre que voy a hacer un viaje le echo un vistazo a los museos de esa ciudad, especialmente a los que son diferentes y originales. Así fue como descubrí este, si bien todavía no lo he visitado pero espero poder hacerlo la próxima vez que visite Francia. Está en Nantes y es el Museo Julio Verne, viajero por excelencia que nos cuenta cómo fueron sus viajes de ficción al centro de la Tierra, a la Luna o a cualquier profundidad oceánica.
Tiene 8 salas en las que se exponen más de un centenar de piezas que guardan alguna relación con el escritor, como diversas cartas, manuscritos, libros, objetos personales, porcelanas, maquetas que hacía para escribir sus novelas y hasta los carteles de las películas que se han hecho basadas en sus libros. Las salas se clasifican temáticamente y en ella podemos encontrar el cuarto de dibujo, el comienzo de los sueños, el océano, los dos Julio, los mundos conocidos y desconocidos, los viajantes, el cuarto de lectura y juegos y el cuarto audiovisual. Todas ellas salas muy completas y que muestran historias completamente diferentes.
El museo está en la rue l’Hermitage 3, en el barrio Sainte Anne, en un precioso caserón de año 1900 que tiene vistas al río Loire y que muestra perfectamente de dónde sacaba la inspiración Verne a pesar de que nunca vivió allí, y es que la zona portuaria de la ciudad hacía desbordar la imaginación de este hombre que creó historias espectaculares. En el 2005 renovaron varias partes del museo para modernizarlo un poco, y ahora tiene un sistema multimedia fantástico para que tu visita sea mucho más dinámica. La entrada cuesta 3€ y visitarlo se presenta como un fantástico viaje a través de mundos increíbles.