Puede que nunca te hayas planteado visitar un mercado cuando estás haciendo turismo por algún pueblo o ciudad, pero lo cierto es que algunos de estos edificios forman parte del patrimonio monumental más interesante de determinados rincones de España. Así, son mucho más que lugares en los que comprar productos frescos.
Lo que hoy vamos a hacer en Vuela Viajes es recorrer algunas de las principales ciudades de nuestro país en busca de los mercados más espectaculares. ¿Te gustaría acompañarnos? ¡Te aseguramos que no te arrepentirás!
Mercado de la Boquería, Barcelona
Como no podía ser de otra manera, tenemos que comenzar hablando del mercado de la Boquería, uno de los lugares más visitados de Barcelona. Fue inaugurado el día de San José de 1840, en unos terrenos que hasta entonces habían sido ocupados por el convento de Sant Josep. Eso sí, es importante tener en cuenta que en este mismo rincón de la Rambla ya se ubicaban los vendedores ambulantes de carne en el siglo XIII. Hoy en día este mercado es sinónimo de modernidad, pudiendo encontrar en él desde verdura, carne y pescado hasta otros productos más imaginativos. Lo mejor de todo es que las paradas tienen mucho encanto.
Mercado de San Miguel, Madrid
Tampoco podía faltar en esta lista el Mercado de San Miguel, un lugar histórico y monumental situado en la plaza del mismo nombre, junto a la Plaza Mayor de Madrid, es decir, en una de las zonas con más más oferta comercial, cultural y de ocio de la capital. Inaugurado a principios del siglo XX, es el único mercado tradicional que se ha construido en hierro. Hoy en día no solo ofrece comprar productos de calidad, sino degustar todo tipo de comida, pasear, tomar algo, participar en actividades… Además, acoge cursos, ferias, presentaciones y posee vinotecas, barras para degustar tapas, una librería, una floristería y una tienda de diseño.
Mercado Central de Zaragoza
También tenemos que hablarte del Mercado Central de Zaragoza, una joya arquitectónica que acoge la mayor oferta de producto fresco de toda la ciudad. También llamado Mercado Central Lanuza, el edificio fue construido en la zona donde se encontraba el mercado al aire libre durante el siglo XIX. El proyecto fue obra del arquitecto Félix Navarro, que se sirvió de nuevos materiales, como el hierro de fundición y el cristal, además de utilizar el ladrillo o la piedra, entre otros. El edificio fue restaurado en 1986, renovando también los puestos de venta, lo que ha servido para que el mercado siga teniendo hoy en día la misma actividad que en sus inicios, conservando el color, la animación y el bullicio.
Mercado Central de Valencia
De estilo modernista, el Mercado Central de Valencia es hoy en día un importante foco económico de la ciudad, y ya no solo por la actividad de los comerciantes, sino por las visitas que recibe y por los actos que acoge. Con una superficie de 8.160 metros, agrupa a unos 300 pequeños comerciantes que ocupan los 1.219 puestos de origen. Es importante tener en cuenta que este mercado siempre se ha caracterizado por la calidad, la variedad y la frescura de sus productos, además de por el trato de los vendedores.
Mercado de la Ribera, Bilbao
Por último, queremos hablar del Mercado de la Ribera, que se encuentra junto a la ría del Nervión en Bilbao, la capital de Vizcaya. Obra del arquitecto Pedro de Ispizua, fue inaugurado en 1929. En 1900 fue reconocido como el Mercado Municipal de Abastos más completo por el Guinness. Y es que tiene una superficie comercial de 10.000 metros cuadrados, ofreciendo diferentes tipos de productos. Comenzó a reformarse en 2009 con el objetivo de renovar su estructura, sus puestos y sus servicios y, así, seguir siendo un referente comercial.