Cuando hablamos de Francia tendemos a centrarnos en París, que es sin duda alguna la ciudad más bonita de todas. Lo es por su arquitectura, por la belleza de la Torre Eiffel, por lo increíble que es el Museo del Louvre o por lo interesante que es pasear por barrios tan pintorescos como Montmartre.
Es precisamente por ello que no debería extrañarnos en absoluto que sea considerada como una de las ciudades más bonitas del mundo. Sin embargo, en Francia hay otras localidades que merece la pena conocer, como es el caso de las que enumero en este artículo.
París
Como acabo de comentar, la capital de Francia es una de las ciudades más bellas del mundo, una de las que más turistas atrae año tras año. Además, en 2018 ha sido elegida como destino favorito de los influencers, así que podríamos decir que enamora a gente de todas las edades. Población: 2,24 millones de personas.
Burdeos
La capital del vino, que fue nombrada patrimonio de la UNESCO, no solo es un excelente lugar para degustar los mejores vinos franceses, sino que también tiene otros atractivos que merece la pena descubrir. Está al suroeste del país y cuenta con edificios tan emblemáticos como la Catedral de Burdeos, el Gran Teatro de Burdeos o Tour Pey Berland, una torre a la que se puede subir para contemplar unas vistas privilegiadas de la ciudad. Población: 240.000 personas.
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Lille
La capital de la región de Alta Francia está al norte del país, muy cerca de la frontera con Bélgica. Es famosa por la Braderie de Lille, un mercado de objetos de ocasión que está considerado como el más importante de toda Europa. El evento empieza un sábado a las 14:00 horas y termina un domingo a las 23:00 horas. Durante ese espacio de tiempo se calcula que reciben la visita de entre 2 y 3 millones de interesados. Población: 230.000 personas.
Estrasburgo
Estrasburgo es una ciudad situada en la región de Alsacia, al noreste del país, muy cerca de Alemania. Es la sede del Parlamento Europeo y se ha llegado a decir que es la capital de la Navidad por lo bonito que es su mercado navideño. Lo más recomendable es ir a Petit France, una antigua zona de pescadores en la que puedes contemplar casitas como las que se muestra en la imagen que ves sobre estas líneas. Población: 280.000 personas.
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Niza
Es la ciudad más importante de la Costa Azul y está situada muy cerca de la frontera con Italia. Allí hay playas espectaculares y callecitas de las que te enamorarás si deseas pasear por Niza sin pisar las grandes avenidas. El casco histórico es una maravilla. Población: 350.000 personas.
Toulouse
Está al sur de Francia, en el departamento del Alto Garona. Es muy conocida entre los estudiantes por ser el lugar elegido por muchos extranjeros para irse de Erasmus. Más allá de eso, en Toulouse puedes disfrutar de plazas preciosas y tienes la posibilidad de tomarte algo en una terraza como si estuvieras en una localidad de la costa española. Además, si todavía quieres un extra de relax, puedes conseguirlo visitando el Jardín Japonés de Toulouse. Población: 450.000 personas.
Marsella
Es la segunda ciudad en importancia si nos ceñimos al número de habitantes. Marsella está en la costa mediterránea y eso se nota. Es un destino de playa repleto de edificios espectaculares, monumentos y museos. Además, cuenta con un puerto muy bonito, el Vieux-Port. Allí te deleitarás paseando mientras escuchas a los músicos anónimos que llenan de alegría y nostalgia sus calles. Población: 860.000 personas.
Nantes
La capital del departamento del Loira Atlántico está al noroeste de Francia. Diría que es una de las ciudades imprescindibles, de obligada visita casi al mismo nivel que París. No es ni mucho menos tan grande y no tiene tantos monumentos, pero estoy convencido de que te encantará por distintas razones. A nivel cultural y artístico tiene mucho que ofrece al turista que llega con ganas de empaparse de algo nuevo. Población: 300.000 personas.
Montpellier
Montpellier, ubicada al sur de Francia, presume de contar con los tranvías más pintorescos de todo el país. La decoración de las líneas uno y dos corrieron a cargo de Garouste y Bonetti, mientras que la línea tres fue cosa del famoso Christian Lacroix. Además de ese detalle, hay que decir que en Montpellier hay plazas preciosas, como es el caso de la Place de la Comédie o la Place de la Canourgue. Te recomiendo que vayas a Lo Monaco, que es la mejor pastelería de la ciudad y está en la misma calle en la que vivió Jean-Jacques Rousseau. Población: 270.000 personas.
Saint-Malo
Probablemente sea la menos conocida de toda esta lista, lo cual no significa que no merezca la pena visitarla. Saint-Malo es una pequeña ciudad portuaria situada en Bretaña, al noroeste de Francia. Todavía conserva las murallas que tan bien le vinieron antaño para proteger su casco antiguo, en el que por cierto merece la pena perderse. Una vez allí te recomiendo coger un ferry hasta Dinard, una ciudad situada a escasa distancia que tiene varias playas en las que podrás relajarte. Población: 50.000 personas.
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Me gustó pero k lastima que no puedo ir X cuestión de dinero pero si es lindo
ni tan mal