Cuando se trata de viajar al extranjero, y especialmente cuando lo hacemos para visitar un país que está situado fuera de la zona Euro, es normal que nos entren una serie de dudas sobre ciertas cuestiones como por ejemplo el pago de los productos y servicios que vamos a consumir allí.
En ese sentido, hay que decir que la mejor opción de todas siempre suele ser la de pagar con tarjeta, ya que como seguramente ya sabrás es la más cómoda. No tienes que preocuparte por ir a sacar dinero del banco antes de viajar y tampoco tienes que sufrir por ir por la calle con una gran cantidad de dinero encima.
Consejos para pagar con tarjeta en el extranjero
Para el pago con tarjeta en el extranjero, te recomendamos solicitar tarjeta de crédito sin comisiones, especialmente si viajas fuera de la zona Euro.
También es importante saber cuánto te van a cobrar por sacar dinero en el extranjero, algo que varía mucho en función de la entidad bancaria con la que tengas contrato, puesto que hay algunas que no cobran absolutamente nada por dicho servicio.
Otro factor que hay que tener en cuenta es el del límite de la tarjeta, para lo que es importante hacer una estimación de lo que se va a gastar, ya que de esta forma sabremos si hay que pedir una ampliación o no al banco.
A la hora de sacar dinero en otros países, fíjate en los cajeros que son considerados como de «marca blanca«. Son habituales tanto en el Reino Unido como en Estados Unidos y a priori podemos tener la percepción de que son ideales, pero el problema suele ser las elevadas comisiones que cobran por retirar efectivo, especialmente si están situados en estaciones y aeropuertos.
En caso de robo o de pérdida, ten siempre a mano el número de teléfono de tu entidad bancaria para solicitar una anulación lo antes posible. Suele haber algún número gratuito, así que infórmate antes de viajar para no verte en un apuro y no perder ni un solo segundo buscando el teléfono en cuestión.
Para terminar, y esto es algo que no solemos tener en mente, nunca está de más contar con una segunda tarjeta por si falla la que utilizamos habitualmente, ya que estando lejos de nuestro domicilio es complicado poder solucionar un problema de este tipo en poco tiempo.