Recorriendo el mundo podemos encontrar playas realmente espectaculares, esas playas que son «de postal», rincones paradisíacos que parece imposible que puedan ser tan bellos. Algunas de esas playas alucinantes las encuentras en Boracay, en Filipinas, una playa con aguas azules tan cristalinas que parecen transparentes y con arena blanca que parece una alfombra perfecta sobre la que tumbarse a tomar el sol.
Filipinas se ha convertido en los últimos años en uno de los destinos favoritos de los turistas occidentales, especialmente de los amantes de las playas y los paisajes naturales. Un destino exótico que además sale muy bien de precio, con lo que es muy atractivo. De hecho, cada vez más parejas deciden viajar allí en su Luna de Miel en lugar de ir a México, el típico destino de novios por excelencia.
Cómo llegar
Boracay es una isla con un paisaje idílico que está cerca de la isla de Panay, una de las islas filipinas más conocidas. Para poder llegar debes ir al aeropuerto de Kalibo, el más cercano, y una vez allí una barca te llevará a Borocay. Es un trayecto corto y seguro, y sin duda merecen la pena las incomodidades ya que estando en la isla verás unos paisajes increíbles.
La isla
Boracay es una isla totalmente turística, lo que hace que cada vez sea más cara porque crece en turistas cada año, pero lo cierto es que no es tan cara como otras muy famosas. Los habitantes viven del turismo y allí hay hoteles y todo tipo de alojamientos que se ajustan a cualquier presupuesto, además de tener también varios negocios de souvenirs, bares o restaurantes.
Sus playas
Las playas de Boracay son espectaculares, de esas en las que eres capaz de sentir la magia solo con pisarla. En cualquiera de sus playas te sentirás de forma increíble, pudiendo disfrutar de un paisaje único que muy pocas veces tendrás la suerte de ver en persona en tu vida.
Estuve ace 26 años Es el parayzo me gustaria bolbel el procimo año febrero Del 2016