Antes de empezar a planear tu viaje a Liberia debes tener en cuenta una cosa: la seguridad en la zona impredecible. El país lleva ya bastante tiempo en la lista de países no recomendados a los que viajar. Después de casi dos décadas de guerra, Liberia parece que poco a poco va comenzando a resurgir. Parece que la paz se mantiene por todas las regiones y los liberianos están entusiasmados con las labores de reconstrucción de sus hogares.
Si Liberia se estabiliza y se abre para los turistas, seguro que ofrecerá un sinfín de anécdotas a los aventureros más intrépidos. La antigua hospitalidad y su enigmática sociedad, no dejan indiferente a nadie. Las tradiciones artísticas de Liberia rivalizaban con las de cualquier parte del continente. Las tradiciones siguen vivas pero de forma muy secreta ya que es difícil mostrar al exterior las costumbres en un país casi totalmente destruido y traumatizado.
Monrovia, sigue “viva” pero sigue considerándose un lugar nada seguro. La pena es que muchos viajeros amantes de la naturaleza, por ahora, no podrán disfrutar de sus densos bosques tropicales llenos de cientos de aves, elefantes, hipopótamos pigmeos, etc.
A lo largo de la costa completamente desierta, están unas inmensas playas de arena blanca que se entremezclan con algunos y tranquilas lagunas donde se podría disfrutar de unos días inolvidables. Como te comentábamos, la situación actual es bastante positiva pero antes de planear un viaje a esta zona lo mejor es que contactes con el Ministerio para saber exactamente cuáles son las condiciones de seguridad.