Las Bermudas son famosas por sus playas de arena rosácea, ese azul cristalino de sus aguas y el verde de sus famosos campos de golf. Gracias a este colorido y a su larga historia podrás disfrutar de un viaje inolvidable. Bermudas tienen una cultura distintiva: se combina la clásica tradición británica (que data de la época colonial) con una actitud más relajada acorde con la zona en la que se encuentran. En los tribunales, por ejemplo, los abogados locales todavía pueden llevar trajes muy informales que llaman la atención de aquellos que no están acostumbrados.

La ciudad de St. George’s data de 1600 y fue nombrada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad. La ciudad de Hamilton (que no debe confundirse con la parroquia del mismo nombre, más al noreste) es el centro de las Bermudas donde se encuentra el puerto principal y la mayoría de las tiendas. El Real Astillero, en West End, es un antiguo astillero británico que se ha transformado en un impresionante y atractivo centro turístico.

Estos tres destinos se pueden explorar fácilmente a pie. El resto de la isla principal, sin embargo, es casi mejor descubrirlo en taxi, motocicleta o en bicicleta si estás en forma ya que el resto de la isla presenta un terreno bastante montañoso. Las principales carreteras son: North Shore Road, Middle Road, la carretera del Sur (también conocido como South Shore Road), y Harbour Road.

Durante mucho tiempo se ha pensado que las Bermudas eran un destino vacacional caro, pero desde que el dólar de las Bermudas está a la par con el americano, los visitantes de los Estados Unidos han aumentado sus visitas lo que ha hecho que el turismo haya aumentado mucho.