A pesar de que Calcuta está marcada por dos grandes problemas como son la superpoblación y la pobreza, también tiene un encanto especial que la convierte en un destino vacacional poco usual. La decadencia se ha desvaneció en muchas partes de la ciudad, y su pletóricos edificios históricos, culturales y religiosos son dignos de recibir largas visitas. Calcuta es un destino que nunca olvidarás.
Aunque se desconoce la fecha de nacimiento de esta ciudad, se podría fijar hace 300 años. Junto a la orilla del río Hooghly. La ciudad nació de la unión de los pueblos Sutanti, Gobindapur y Kalikata. Al principio se convirtió en una especie de puerto británico que poco a poco convirtió la zona en un afamado centro comercial. Hoy en día sigue siendo una de las más importantes ciudades de la India, una ciudad con un alma, un pasado legendario y una rica tradición artística.
La gran riqueza y la gran pobreza viven unidas directamente. Las tiendas de antigüedades se entremezclan con el moderno sistema de metro que poseen. Por si lo que te preocupan son las compras, aunque no sea el destino más apropiado, Calcuta también tiene algunas de las boutiques más de moda del momento.
La ciudad también goza de una gran reputación como la capital cultural e intelectual de la India. Esta, fue el hogar del ganador del Premio Nobel de poesía Rabindranath Tagore (1861-1941) y el famoso director de cine Satyajit Ray (1921-1992). Fuera del subcontinente, la ciudad es principalmente conocida por sus pobres barrios y el trabajo realizado allí por la Madre Teresa.