Al sureste de Venezuela en el estado de Bolívar y dentro del Parque Nacional de Canaima -sexto del mundo en extensión- se encuentra el famosísimo Salto del Ángel. Desde casi un kilómetro de altura el agua cae al vacío y se va convirtiendo en pequeñas gotas de agua que el viento arrastra empapándolo todo. Es tan inmensa que cuesta apreciar toda su magnitud, pero no cabe duda sobre su grandeza.
Fue descubierta por un piloto norteamericano, Jimmy Ángel, en los años veinte mientras realizaba una búsqueda de oro en los límites venezolanos del Amazonas. Esta búsqueda resultó fallida. Sin embargo, descubrió un lugar al que le puso su nombre: el Salto del Ángel. Descubrió así la mayor cascada del mundo.
El parque en el que se encuentra esta inmensa cascada tiene una de la vegetación y fauna más antigua del mundo. Se encuentran en él también diversos yacimientos de minerales, que incluyen minas de oro y de diamantes. Comparte además protagonismo con las Tepuyes, unas inmensas torres de piedra arenisca que se han ido formando por la erosión durante sus 180 millones de años.
Para llegar a este Salto del Ángel evitando largos y costosos viajes por tierra o en barco, lo mejor es el avión. Es posible disfrutar de una perspectiva aérea de la cascada sobrevolándola en una avioneta si el día nos lo permite. Podremos apreciar así la belleza y magnitud del lugar. Desde el mismo aeropuerto de Canaima salen tanto aéreas como rutas por el río hacia el Salto del Ángel, las cuales cuestan entre 20.000 y 25.000 bolívares.