Al sur de la capital de Kenya, Nairobi, a 137 kilómetros, se localiza el Parque Nacional de Amboseli, lugar en el que se encuentra la cima más alta del continente africano, el Kilimanjaro con sus 5.895 metros de altura que de manera majestuosa hace acto de presencia en el horizonte sur. Fundado en el año 1.977, el Parque Nacional de Amboseli tiene una superficie de más de 390 kilómetros cuadrados. Entre los animales que viven en él, está la población de elefantes más importantes de África.
La naturaleza se muestra en este lugar en su expresión más salvaje y rodeada de escenarios imposibles de ver en cualquier otro punto de África, y es que la mezcla de paisajes formados por llanuras, oasis, pantanos y lagos, con el Kilimanjaro y sus cada vez más escasas perpetuas cimas nevadas como espectacular telón de fondo, lo convierten en un lugar casi escogido por los dioses.
El Parque Nacional de Amboseli está dividido en cuatro sectores, en los cuales se puede contemplar la variedad y mezcolanza del crisol de paisajes que la naturaleza ha conformado en este rincón de África. En los sectores norte, centro y oriental, la sabana como escenario, y los elefantes, cebras, rinocerontes y termiteros son sus protagonistas principales. En el sector occidental, la llanura y la planicie conviven con las avestruces.
Animales y también personas viven en el Parque Nacional de Amboseli, y es que en este territorio habitan los masai, mítico pueblo guerrero que sigue sobreviviendo en sus tierras dedicándose al pastoreo. Este pueblo nómada ha tenido la enorme virtud de vivir en armonía y paz con la naturaleza que les rodea sin degradarla de ninguna manera.