En Palma de Mallorca puedes encontrar un montón de lugares de interés que van más allá de disfrutar de sol y playa, algo que por supuesto también puedes hacer pero que no es lo único que ofrece esta ciudad, que es también la mayor ciudad portuaria de la isla mallorquina.
Uno de los lugares que más visitantes recibe cada año es el Castillo de Bellver, uno de los 3 castillos europeos que tiene planta circular y que es todo un símbolo de la ciudad balear. Este castillo de estilo gótico está situado a 3 kilómetros de la ciudad de Palma y fue edificado a principios del siglo XIV por orden del rey Jaime II de Mallorca. Posteriormente se han hecho varias reformas pero su aspecto exterior se mantiene intacto, ofreciendo una fortaleza de gran belleza a todos sus visitantes.
Está situado en un monte a 112 metros sobre el nivel del mar y rodeado de un espectacular bosque desde el cual puedes disfrutar de unas maravillosas vistas de la ciudad, del puerto y de la sierra de Tramontana. Todo un lujo para los amantes de la fotografía. En el patio se realizan muchos actos como conciertos y diversos eventos culturales, además de actos protocolarios como presentaciones de diversa índole. En el recinto que hay en el bosque están los establos de la policía montada municipal.
Actualmente alberga el Museo de Historia de Palma de Mallorca, empezando como un pequeño museo en el año 1932 pero convertido en lo que es ahora en el año 1976. En el museo se puede disfrutar de la historia de Palma de Mallorca desde sus primeros pobladores hasta la Edad Media, además de poder ver también una extensa colección de esculturas clásicas del cardenal Despuig.