Ya va quedando menos para disfrutar de las vacaciones. Además de sol y playa, también hay destinos de interior que son ideales para esta época del año, ya se quiera pasar más días o bien hacer una escapada durante esos días libres o un fin de semana. España es una buena opción para este tipo de viajes porque todas las comunidades autónomas tienen numerosos municipios o zonas de interés para visitar. En este caso, vamos a hacer un recorrido por algunos de los principales enclaves que, al menos, deberían visitarse una vez en la vida. En concreto, nos vamos a detener en cinco municipios españoles a los que, probablemente, volverás más de una vez porque tienen mucho, mucho encanto.
Lerma
La localidad de Lerma, en Burgos, está considerada como uno de los pueblos más bonitos de España. Situada a la orilla del río Arlanza, ha sido testigo del paso de numerosas culturas y civilizaciones, aunque el siglo XVII fue cuando se produzco su mayor cambio al convertirse en una villa ducal. El duque de Lerma, Francisco Gómez de Sandoval y Rojas, construyó las edificaciones más destacadas que, hoy en día, se conservan en buen estado como el Palacio Ducal, la Colegiata o la Plaza Mayor, entre otros atractivos de este municipio.
Zuheros
Otra de las localidades que debe visitarse, al menos, una vez en la vida, es Zuheros. Este municipio de Córdoba está situado en el Parque Natural de las Sierras Subbéticas. Declarado conjunto histórico-artístico en 2003, es un destino llamativo por sus calles estrechas y empinadas. Además, es muy bonito ver sus casas blancas encaladas. Aparte de todo su casco urbano interior, no hay que olvidarse de visitar el parque periurbano que rodea al pueblo por la zona norte y que cuenta con varios senderos y miradores para ver unas magníficas vistas.
Buitrago de Lozoya
En la Comunidad de Madrid, está Buitrago de Lozoya. Una villa medieval que rodea el río Lozoya y que cuenta con uno de los recintos amurallados más importante y mejor conservados de esta autonomía. Entre sus atractivos, también destacan sus calles, así como el Castillo de los Mendoza, que se puede visitar, y el Puente del Arrabal. El recorrido igualmente leva a ver la Iglesia de Santa María del Castillo y el Museo Picasso. Este último se halla en los bajos del ayuntamiento local. Y, precisamente, su casco urbano no solo por su interés o belleza, sino porque está declarado conjunto histórico-artístico desde el año 1993.
Alcalá de Júcar
En Albacete, uno de los mejores destinos de interior está en Alcalá de Júcar. Este municipio está situado en uno de los meandros del río Júcar, compartiendo esta particularidad con algunos de los otros municipios anteriores. Es un pueblo muy bello de ver y llamativo porque las casas están excavadas en la montaña y las estrechas y empinadas calles llevan a sus monumentos. Entre los que hay que ver figuran, por ejemplo, el castillo y el puente romano. También merece la pena ir a la Ermita de San Lorenzo y la Iglesia de San Andrés.
Sigüenza
Y, finalmente, en esta ocasión, la última parada de esta ruta la vamos a hacer en Sigüenza, en Guadalajara. Esta localidad, también conocida como ‘Ciudad de Doncel’, es una de las localidades medievales que está mejor conservada en España. Entre sus principales atractivos destaca la catedral y el castillo, que hoy está convertido en un parador. También es digna de ver su Plaza Mayor. Y, por supuesto, en esta localidad no puede faltar un recorrido por sus callejuelas para descubrir casas palaciegas, conventos y otros atractivos que hacen que el callejeo sea realmente apasionante.