Las mejores bodegas de Nueva York tienen una larga historia. De hecho, la más antigua de la nación es la conocida como Brotherhood, que se construyó en 1839 en Washingtonville. Mientras otros estados se están manteniendo casi inexistentes en este tema de los vinos, Nueva York se encuentra actualmente en el medio de un gran boom.
Entre el año 2000 y el 2009 han abierto en la zona un total de 86 nuevos lugares en los que degustar vinos por doquier. Estos lugares tan especiales en Nueva York, se elevan ya a un total de 200. Esa cifra incluye grandes “bodegas”, pero muchas de estas como por ejemplo las del Empire State son pequeñas, aunque no dejan de ofrecer a sus clientes diferentes catas y rutas especializadas en el tema.
Hoy en día, Nueva York tiene cinco regiones del vino, y nueve zonas vitivinícolas. Una de las visitas que no debes perderte es la de Finger Lakes Wineries. Finger Lakes Wineries, es la zona de producción de vinos más importantes de Nueva York desde la Guerra Civil. La región de Finger Lakes es el hogar de la mayoría de las bodegas, y produce un gran volumen de vino. Por la zona encontrarás diferentes lagos y un glaciar que te sorprenderá.
La zona vinícola se encuentra situada entre las inclinadas colinas y el suelo glacial. Los dos lagos más importantes son el Cayuga y Séneca, y cerca de ellos se pueden realizar diferentes rutas. También hay excelentes rutas por los lagos Canandaigua y Keuka. Si tienes un poco más de tiempo, también podrás dirigirte a las bodegas de Long Island.