Ya hemos comentado en otras ocasiones que los cruceros son uno de los viajes que más se eligen actualmente, gracias principalmente a la facilidad para poder visitar varias ciudades en un corto período de tiempo. Si nunca has hecho ninguno, se abre ante ti un desconocido abanico de posibilidades que tendrás que analizar a conciencia no solo para elegir el crucero perfecto para ti sino también para que una vez en él puedas disfrutarlo totalmente.
Hay muchas cosas que debes tener en cuenta antes de embarcarte, y otras que debes saber para que cuando estés a bordo puedas sacarle un mayor partido a todo. Un crucero disfrutado plenamente y en el que no han surgido contratiempos se convierte en una de las mejores experiencias que puedas tener en tu vida, así que hay que procurar que así sea cuidando cada detalle.
Lo primero que tienes que hacer es elegir el crucero, que eso depende de los lugares que quieras visitar y del tiempo que quieras estar en él. Hoy en día hay cruceros por todos los rincones del mundo, así que tendrás infinitas opciones. Si nunca has viajado en barco, te recomiendo que hagas un pequeño trayecto en cualquier barco que encuentres en tu ciudad o una cercana para saber si te mareas o cómo te sientes. Esto es importante especialmente si te mareas mucho ya que tu primer día a bordo puede ser un infierno (por experiencia propia lo digo).
Documentación a mano
A la hora de contratar el crucero, la compañía te dará una lista con toda la documentación que necesitarás para ese viaje en concreto, que dependiendo de qué países vayas a visitar puede ser el pasaporte o un visado especial, además de alguna vacuna o cualquier otra recomendación médica. Sigue al pie de la letra las instrucciones de la naviera para que no te encuentres con un impedimento a la hora de poder desembarcar en algún país, algo que sucederá si no tienes los papeles en regla.
Disfrutando a tope
Una vez a bordo, disfruta al máximo de todas las actividades que ofrezca el crucero, que pueden ser casinos, espectáculos musicales, obras de teatro, tiendas, sesiones de cine, spa, etc. Prepara con antelación lo que quieres hacer en cada ciudad en la que el barco hace escala, teniendo claro si quieres contratar una excursión o si prefieres ir por libre para conocer todo a tu ritmo sin depender de otros.