Los pueblos son un buen destino para vivir una experiencia diferente, con independencia de si es verano o invierno. La ventaja de España es que cuenta con localidades con mucho encanto tanto en zonas costeras o en litoral como en el interior. Y, precisamente, aquí nos vamos a detener para hablar de uno de los pueblos más bonitos de España. Situado en Soria, la localidad de Calatañazor puede definirse como un pueblo medieval en el que hay mucho que ver y disfrutar.
Los atractivos
Calatañazor es un pueblo con gran belleza, gracias a que mantiene ese carácter del medievo preservado hoy en día y reconocible claramente por la combinación de piedras, madera y cuestas.
Además, no hay que perderse la reserva natural de la zona ni olvidarse de conocer toda su historia. Y alberga mucha porque han dejado huella múltiples pueblos y personalidades como el cineasta Orson Welles. También es importante el legado del caudillo Almanzor.
Y es que, hace más de dos milenios, esta zona ya estaba habitada. Esto permite que haya mucho patrimonio. Por ejemplo, entre los puntos a visitar, destaca la ermita de La Soledad, de estilo románico puro, aunque se observan algunas adaptaciones que se han ido haciendo con el paso de los años.
Esta ermita es de una sola nave y en ella pueden verse motivos vegetales o esféricos como principal decoración y piedra visto en contraste con la muralla, que se yergue sobre ella.
Menos queda por ver de la ermita de San Juan que debe formar parte de la ruta, al igual que la iglesia de Nuestra Señora del Castillo. Y, por supuesto, hay que adentrarse en las calles de Calatañazor, que son el eje principal del pueblo. En ellas, se ven las casas con su arquitectura tradicional con piedra, adobe, madera, teja árabe y recovecos por los que pueden verse los montes.