Si te gustan los paisajes montañosos y disfrutas enormemente cuando estás ante ellos, sin duda debes visitar al menos una vez en la vida las Montañas Rocosas en Canadá, un lugar perfecto para los amantes de la naturaleza. En su interior albergan nada menos que 5 Parques Nacionales, y todo el conjunto (a excepción de un parque) fue declarado hace ya varios años Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Cuatro de esos parques están entrelazados, lo que deja un paisaje impresionante. Los 4 parques que son Patrimonio de la Humanidad son el Parque Nacional Banff, el Parque Nacional Jasper, el Parque Nacional Yoho y el Parque Nacional Kootenay. El que no está incluido por la UNESCO es el Parque Nacional Waterton y está más al sur, a lo largo de la frontera internacional con Estados Unidos.
Las Montañas Rocosas canadienses son un subsistema de las Montañas Rocosas, las cuales abarcan parte de la costa occidental de América del Norte, el noroeste de Alaska, Canadá y llega hasta el suroeste de Estados Unidos. El pico más alto de todo el conjunto está en California y es el Monte Whitney, con 4.421 metros de altitud.
La parte canadiense se reparte en varios grupos de cordilleras que a su vez tienen múltiples cordilleras, lo que deja una estampa realmente interesante e impactante. Las más importantes son las Cordilleras Muskwa, las Cordilleras Hart, Área Sir Alexander, Grupo Resthaven o Cordilleras Park Central Norte.
El sector de las Montañas Rocosas que está en Canadá discurre por las provincias de Columbia Británica y Alberta, y una pequeña parte de este sector está en los estados norteamericanos de Idaho y Montana. El extremo norte está en un lugar idílico: la llanura del río Liard, en la Columbia Británica.