Cualquiera de las islas españolas es un lugar maravilloso para relajarte y disfrutar del verano con el mejor paisaje posible. Y una de las más bonitas es Menorca, un destino ideal si lo que quieres es estar en la playa y no hacer nada. Dentro de las muchas playas y calas que tiene me voy a centrar en Cala Galdana, un lugar espectacularmente bonito que está en una isla que ha sido declalara Reserva de la Biosfera, así que imagínate cómo debe ser el paisaje.
Cala Galdana está en la costa sur de la isla y tiene muchísima vegatación y una arena blanca preciosa. Es una playa muy segura, y grande, que tiene forma de semicírculo y acantilados muy altos donde también hay un montón de pinos para protegerte del viento, lo que la convierte en una playa perfecta para ir a nadar y a relajarse ya que sus aguas son totalmente tranquilas. Si buscas un lugar con olas no vayas aquí porque no encontrarás ni una.
Es estupenda para ir con niños gracias a la tranquilidad que trasmite, y entre los servicios que puedes encontrar allí hay duchas públicas, hamacas, sombrillas y un puesto médico. Además, puedes realizar actividades actuáticas como ir en lancha, en hidropedales o canoa, así que es el lugar perfecto para quien busca tanto tranquilidad como algún deporte en el agua. Puedes hacer también varias excursiones en barco para recorrer toda la costa o para hacer buceo.
Cala Galdana está únicamente a 23 kilómetros de Ciudadela y a unos 36 de Mahón, así que estando allí puedes recorrerte toda la isla en un día para disfrutar de sus diferentes paisajes y visitar diferentes playas, aunque estoy segura que en cuanto pongas un pie en ésta no querrás salir de allí.