El archipiélago de las islas Salomón se compone de cerca de 1.000 islas tropicales dispersas en el suroeste del Pacífico, justo al este de Papúa Nueva Guinea. Esta ubicación tan remota, las ha mantenido como una joya de gran belleza natural que poco a poco se está convirtiendo en un gran destino turístico. La industria turística se caracteriza por un lento desarrollo.
Una de las principales atracciones para los turistas es la espectacular vida marina que posee la zona. Podríamos decir que es un paraíso para los buceadores. Las islas principales son Guadalcanal, Malaita, Choiseul, Georgia, Nueva, San Cristóbal y Santa Isabel. La capital de Honiara, en Guadalcanal, y también merece unos días de dedicación turística. En ella, encontrarás un museo y un jardín botánico.
Los pueblos y los recorridos paisajísticos están a poca distancia de la capital, al igual que los populares tours de los campos de batalla de la Segunda Guerra Mundial y los pueblos de Rennell y Bellona. La nación moderna de las Islas Salomón es una fusión de dos archipiélagos, instigados por los británicos en los últimos años del siglo XIX, y marcando el punto más alto de la rivalidad imperial en el Pacífico entre las principales potencias europeas.
Las islas Salomón se mantuvieron bajo el dominio británico hasta la década de los años 70. Se creó un autogobierno en 1976 y la plena independencia se logró dos años más tarde. El principal debate político desde entonces ha sido excesiva descentralización. Un ambiente informal lleno de tradiciones locales prevalece junto con las costumbres europeas. Unos datos curiosos: los hombres no suelen llevar nunca corbata y las mujeres deben vestir “modestamente”, teniendo en cuenta que ciertas áreas públicas pueden estar reservadas exclusivamente para los hombres.