España es un país con muchas posibilidades para hacer turismo, aunque ahora por la covid-19 haya algunas limitaciones. Sin embargo, es un buen momento para ir haciendo planes o disfrutando de pequeñas escapadas, siempre respetando las normas y medidas. Y un buen destino para estos días son los Picos de Europa. Un enclave natural, que es uno de los más deslumbrantes del país y también del continente europeo. Con un recorrido por Asturias, Cantabria y León, se puede desconectar y disfrutar de un paraje de increíble belleza.
Ubicación
La cordillera cantábrica alberga en su parte central los tres macizos que forman el Parque Nacional de los Picos de Europa. Se trata del macizo Occidental o Cornión, llamado parque de Covadonga (Asturias), el macizo central o de los Urrieles, en Cantabria, y el macizo Oriental o de Ándara, en Castilla y León.
Ruta
La ruta más idónea para recorrer este enclave es comenzar por Asturias, en concreto, en Cangas de Onís para ver esta población en la que abundan las tiendas de material de montaña y víveres, ya que es el punto de partida hacia los picos más altos de la cordillera.
Cerca queda Covadonga. Un lugar que es muy conocido por la santa cueva que cuelga de una roca y la cascada a sus pies. También hay que ver los lagos de Enol y La Ercina, que conforman otro santuario en estos parajes y que se hallan a más de 900 metros. Desde allí, además, parten varias rutas de senderismo.
El recorrido nos lleva al Naranjo de Bulnes o Picu Uriellu, adentrándose ya en el Macizo Central, siendo posible subir en el funicular. Igualmente, se puede subir a La Peña y no hay que perderse la garganta del Cares, un sendero de ocho kilómetros, que cruza túneles y puentes, ni el descenso desde el Naranjo por Poncebos por el camino del canal del Tejo. Son algunas opciones a tener en cuenta dentro del parque nacional, que alberga muchos más encantos.