¿Para qué recorrer miles de kilómetros en busca de playas paradisíacas teniendo tan cerca las Baleares? Sus arenales no tienen nada que envidiar a los del Caribe aunque se echen de menos las palmeras y los cocos. Aguas turquesas, arena fina, buen ambiente… Lo tienen todo para atrapar al turista, y por eso cada verano reciben la visita de cientos de miles de personas que vuelven a sus casas con muy buen sabor de boca.
Si vas a pasar unos días en las Baleares y te has fijado como objetivo bañarte en algunas de sus mejores playas, te recomiendo que tomar nota de las que menciono a continuación, ya que todas ellas son espectaculares.
Cala Presili (Menorca)
Siempre te dirán que vayas a Macarella y Macarelleta, que son dos calas increíbles. Sin embargo, creo que también deberías dejarte ver por Cala Presili, a la que también se conoce como Capifort. Está al norte de Menorca y todavía mantiene la etiqueta de playa virgen. A diferencia de lo que ocurre con otras playas de esa zona de la isla, sus aguas son calmadas y la arena es fina y blanca. Es una de las mejores playas nudistas de Menorca (no toda la playa es nudista).
Caló des Mort (Formentera)
Es muy pequeña, sí, pero te aseguro que impresiona. Es un rincón que dice mucho del pasado marinero de Formentera, pero que en realidad tiene más pinta de piscina que de playa. El color azul celeste de sus aguas invita a darse un chapuzón en un entorno digno de fotografiar desde varios ángulos. Te costará colocar la toalla y la sombrilla en lo que es la orilla en sí, pero no tendrás tanto problema si eres de los que se conforman con estar tumbados sobre una roca más o menos plana y blandita.
Caló des Moro (Mallorca)
Mallorca suele quedarse un paso atrás cuando se trata de hablar de playas bonitas de las Baleares, pero sería injusto no incluir ni un solo arenal en esta lista. Caló des Moro, sin ir más lejos, es todo un regalo para la vista desde arriba o a pie de playa. Si quieres bañarte tendrás que bajar por una escalera de piedra y roca que no es accesible para todo el mundo. Eso sí, la recompensa bien merece el esfuerzo, puesto que sus aguas son de las más turquesas de la isla. ¿El único problema? Que si no eres de los que madrugan no tendrás ni una posibilidad de poner la toalla en los meses de verano.
Cala d’Hort (Ibiza)
Ibiza es sinónimo de fiesta, pero también hay otras muchas cosas que hacer en la isla blanca. ¿Un buen ejemplo? Ir a playas como Cala d’Hort, que con los islotes de Es Vedrá y Es Vedranell a lo lejos te hipnotizan durante tu jornada de baño. Además, hay días en los que el viento sopla lo suficiente como para justificar que algunos surferos de la zona se acerquen con sus tablas.
Ses Illetes (Formentera)
Reconocida como una de las mejores playas del mundo, no podía quedarse fuera de esta recopilación. Es el mayor tesoro de Formentera, un arenal ubicado en el parque natural de ses Salines que debe su nombre a los islotes y los arrecifes que encontramos frente a sus aguas. Normal que haya sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
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