¿Mejor solo o acompañado? Eso es lo que algunos se preguntan cada vez que planifican sus vacaciones de verano. La verdad es que la respuesta depende de cada uno, aunque sí es cierto que hay una serie de ventajas y desventajas que conviene analizar. Basta con ponerlas en una balanza para tomar una decisión de la que no arrepentirte.
Si ves que nos hemos dejado ventajas o desventajas, no dudes en añadirlas en el apartado de comentarios. Será un placer ampliar este artículo con nuevas aportaciones.
Ventajas de viajar en grupo
Ahorras dinero: Como es lógico, viajar en grupo tiene ventajas que se manifiestan de forma significativa en el dinero a desembolsar por casi todo. Por ejemplo, no es lo mismo reservar una habitación de hotel para una persona que reservar una casa entre 12 personas.
Te sientes más seguro: Aunque hayas contratado un buen seguro de viaje para cubrirte las espaldas ante cualquier imprevisto, viajar en compañía te permite ir más tranquilo a los sitios porque sabes que siempre habrá alguien preparado para llevarte al hospital o pedir ayuda en caso de que se produzca un accidente.
Compartes experiencias inolvidables: Viajar solo te permite conocerte mejor. Eso es verdad y no lo voy a negar. Sin embargo, viajando con otras personas puedes compartir todo lo que ves por primera vez, algo que es sinónimo de diversión a menos que no te lleves del todo bien con quien viajas.
Todo se planifica más rápido: A menos que viajes con personas con gustos completamente distintos a los tuyos y que no están dispuestos a dar su brazo a torcer, la planificación de un viaje en grupo se termina mucho más rápido que cuando hay que hacerla de forma individual, puesto que la información se recopila con más facilidad.
Los ‘selfies’ no son tu única pose: Quien viaja solo puede hacer dos cosas a la hora de inmortalizar momentos. O bien le deja la cámara a alguien o bien se hace un ‘selfie’. Eso es algo que no sucede cuando viajas en grupo, ya que siempre hay alguien que puede hacerte una foto, ya sea solo o con otros viajeros.
Desventajas de viajar en grupo
Poca intimidad: Tus momentos más íntimos no están garantizados. El hecho de viajar con más personas y compartir alojamiento hace que no puedas disfrutar de tu día a día con un nivel de intimidad como el que experimentas en tu casa, sobre todo si viajas con personas con las que no tienes la misma confianza que tendrías con un familiar al que ves casi cada día.
Gustos e intereses distintos: Cuando uno viaja en grupo debe ser flexible para no volverse loco. Debe serlo más que nada porque no siempre llueve a gusto de todos, así que un día se hará el plan que tú quieres, pero al día siguiente tendrás que amoldarte al plan preferido de otra persona. Eso es algo que no llevan muy bien quienes consideran que las vacaciones son el único momento del año en el que pueden hacer lo que les dé la real gana.
La lentitud: Parece que no, pero este es un problema que puede desquiciar a más de un viajero. ¿Por qué? Pues porque los hay que se levantan a las 8 de la mañana con ganas de ver todo lo que sea posible para aprovechar el día al máximo, pero también los hay que se levantan tarde y no se esmeran demasiado por salir a la calle porque antes tienen que hacer mil cosas.
Presupuestos dispares: Otro problema que puede surgir al viajar en grupo tiene que ver con el dinero. Es verdad que ahorras en cuestiones tan importantes como el alojamiento, pero no menos cierto es que te puede salir caro el viaje si te vas con gente con un poder adquisitivo muy superior al tuyo. Mientras que para ti puede ser suficiente ir a un bar a comer un bocadillo antes de reemprender la marcha, para otros puede que sea un requisito imprescindible el de ir a un restaurante de lujo para degustar la gastronomía del lugar.
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