Hoy te invito a disfrutar de un paseo por una de las zonas con más historia y tradición de Francia. Nos adentramos en los Castillos del Loira, unas construcciones que se ubican en la parte central del país y que fueron levantados o reconstruidos durante los siglos XV y XVI.
Son muchos los castillos que puedes visitar si te adentras en este espacio que nos traslada hasta el pasado más señorial de Francia. He seleccionado 7 de ellos para que tengas una primera aproximación. Si te gusta lo que lees ya conoces el siguiente paso: ir a visitarlos.
Castillo de Chambord
Es uno de los más majestuosos y forma parte de los castillos que son Patrimonio de la Humanidad. Tiene ocho torres y más de 400 habitaciones. A su alrededor disfrutamos de la naturaleza, con un bosque e increíbles parques y jardines. Está considerado como el más grande de todos y se levantó para ser el pabellón de caza del Rey Francisco I.
Castillo d’Ussé
Si te gustan los cuentos estás en el lugar adecuado. Cuentan que fue el castillo que inspiró al escritor de La Bella Durmiente, así que tanto por su aspecto como por este dato es verdad que nos encontraremos en un cuento.. Además, también es referencia para los palacios Disney. Los muebles, sus tapices flamencos y la capilla renacentista son algunas de sus joyas interiores.
Castillo de Cheverny
Es otro de los más conocidos dentro de la amplia selección de Castillos del Loira. Se edificó en 1620 y es de estilo renacentista. Cuenta con unos jardines preciosos, un bosque y hasta un museo. En su interior, como no podía ser de otra forma, no faltan muebles elegantes y caros y una decoración opulenta que merece la pena visitar. Como curiosidad, este lugar inspiró al creador de Tintín y, de hecho, en su interior hay referencias a ello: cuenta con una exposición permanente que te permitirá adentrarte en el castillo de Moulinsart.
Castillo de Azay-le-Rideau
Este castillo, de arquitectura renacentista, está rodeado por un foso (y construido sobre una isla en el río Indre) y tiene unos torreones impresionantes, con ventanas geométricas. Un claro ejemplo de toda la majestuosidad que encontramos en los Castillos del Loira. Su escalera de honor es una de las partes más célebres de este edificio, que está rodeado de jardines y que será todo un regalo para nuestro viaje.
Castillo de Chenonceau
Este castillo se levantó sobre el río Cher y es uno de los más icónicos de esta ruta por el Valle del Loira. Está considerado como uno de los más imponentes del mundo, y no es para menos. Se le conoce como el “castillo de las damas”. Es uno de los más visitados y es que pasear por sus jardines, parques y galerías es una de las cosas que tienes que hacer cuando vayas hasta este lugar. Tiene un laberinto, una plantación vitivinícola y un montón de secretos más.
Castillo Real de Blois
Este castillo (también Patrimonio de la Humanidad) se convirtió en la residencia favorita de los reyes franceses en el Renacimiento. Juana de Arco fue bendecida en su capilla en el año 1429. El castillo fue restaurado y se transformó en museo con el reinado de Luis Felipe. En su interior encontramos elementos clásicos de estilo gótico y renacentista. Destaca su escalera de honor y los aposentos reales.
Castillo de Sully-sur-Loire
Terminamos este repaso por un castillo no excesivamente grande pero sí muy bello. Se considera una construcción militar, con carácter defensivo, y no tanto como una residencia. Aunque a pesar de ello contó con ilustres invitados como Voltaire, Juana de Arco o Luis XIV.
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