Este imponente santuario del Islam está en Haram el Sherif, también conocido como Explanada del Templo, en el barrio musulmán de Jerusalén. Se trata de un edificio muy singular dominado por una gran cúpula dorada. Una obra maestra de la arquitectura islámica.
La Cúpula de la Roca es un edificio de planta octogonal, cuya arquitectura transmite equilibrio y armonía. De hecho, su planta, sometida a leyes geométricas simbólicas, se ha convertido en un modelo para la arquitectura islámica posterior.
Un templo para todos
El santuario es una de las joyas más emblemáticas de Tierra Santa y tiene a gala ser uno de los pocos templos cuya santidad es reconocida por tres religiones. De hecho son muchos los peregrinos de diferentes confesiones que la visitan constantemente.
Ya en el interior, en el centro mismo de la cúpula, surge la gran roca donde Abraham aceptó el sacrificio de su hijo Isaac, en un acto que afianzaba el monoteísmo del cristianismo. Para los musulmanes la roca marca el centro del mundo, según la geografía clásica musulmana. Bajo la gran roca hay una gruta llamada el Pozo de las Almas, ya que la leyenda dice que las almas de los difuntos se detienen en esa gruta antes de desaparecer.
Increíbles y sublimes mosaicos
La maravillosa cúpula alberga un espectacular mosaico de oro y cristal decorado con motivos grecorromanos y, rodeando el tambor, se realizó una cenefa de nada menos que 240 metros de largo cuyos símbolos glorifican a Jesús. Para proteger esta exquisita decoración de los rigores del clima, la cúpula está formada por dos superpuestas con un espacio entre ambas.
En el exterior destacan los maravillosos mosaicos de cerámica, que han sido restaurados en varias ocasiones. El friso lleva una cenefa con versículos del Corán.